¡Feliz Martes! Hoy hablamos sobre la “pistola” inyectora de grasa. La transferencia de grasa se realiza mediante el uso de jeringuillas o un inyector de grasa o “pistola de inyectar grasa” adherido a cánulas de varios tamaños según la zona del cuerpo a tratar. Se utilizan pequeñas jeringas (1 cc) para transferir grasa a áreas pequeñas como la cara, manos, labios mayores, ya que se necesitan pequeñas cantidades del injerto y mucha precisión de la técnica de inyectar en estas áreas.
Las áreas más grandes para dar volumen con grasa autóloga incluyen los senos, las “indentaciones en las caderas” y las nalgas. Se utilizan mayormente jeringas más grandes (20 cc, 30 cc, 60 cc) para transferir grasa a estas áreas. Múltiples jeringuillas generalmente se utilizan para acelerar el proceso, lo que resulta en un aumento en el uso y el costo de los materiales desechables.
Una alternativa al uso de jeringuillas es un inyector de grasa reutilizable. Hay varios tipos y tamaños; algunos diseños solo incluyen el mango y jeringas desechables de varios tamaños se pueden ajustar al mango y otros diseños tienen una jeringa integrada reutilizable de diferentes tamaños, comúnmente de 25 cc y 50 cc.
Las ventajas de esta “pistola” inyectora de grasa son:
- Es reutilizable: se puede esterilizar en autoclave.
- Puede calibrarse para depositar una cantidad preestablecida de grasa en un área determinada. Esta ventaja puede evitar que se depositen grandes cantidades de grasa en un área determinada que potencialmente podría conducir a una necrosis grasa.
- Evita el aumento en la cantidad de desechables.
Una desventaja del inyector de pistola sería su tamaño, ya que podría considerarse voluminoso y difícil de manipular. No obstante, existe una curva de aprendizaje para todo en cirugía. ¡Pruébelo y decida por su cuenta! Y como siempre digo en todas mis publicaciones…#lagrasaesoro
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